Ataques a la memoria

15-05-2020| En las últimas semanas ocurrieron ataques contra sitios señalizados y expresiones de homenaje popular a las víctimas del terrorismo de Estado. Las sombras del negacionismo, los dos demonios y la impunidad salen en medio de las noches del aislamiento social, preventivo y obligatorio a patotear la memoria.

Organismos y áreas estatales de derechos humanos denunciaron, públicamente y ante la Justicia Federal, destrozos y ataques en la Ciudad de Buenos Aires y en Santa Fe.

Militantes y familiares informaron a través de redes sociales que las baldosas colocadas en memoria de estudiantes del Colegios Normal 7 de CABA fueron cubiertas de brea. Esas marcas fueron colocadas en homenaje a las estudiantes, detenidas desaparecidas Liliana Aimetta, Dora Falco, Silvia Gallina, Teresa Israel, María Delia Leiva, Mónica Teszkiewicz y Susana Silver. Significativamente, esto ocurrió el mismo jueves que la derecha promovió un cacerolazo “contra el comunismo”. En la misma ciudad, los murales por la memoria, la verdad y la justicia del colegio Normal 8, del Comercial 25 y del Centro Cultural La casa de Teresa también fueron atacados. Inscripciones reivindicativas del genocida Jorge Rafael Videla pueden verse sobre las obras.

En Santa Fe, el predio del Ejército denominado Campo San Pedro, donde funcionó un centro clandestino de detención, sufrió destrozos por parte de manos anónimas. Ese lugar es un Sitio de Memoria señalizado bajo ley nacional 26691 y por lo tanto bajo preservación para la verdad y por la justicia. Familiares de detenidos desaparecidos de esa provincia junto a la Secretaría de Derechos Humanos local hicieron público el hecho y presentaron denuncia ante la Fiscalía del Tribunal Oral Federal. También denunciaron el robo de sus materiales y la sustracción de las rejas de la casa principal. En este lugar fue hallada una fosa clandestina en la que se recuperaron los restos de 8 militantes detenidos desaparecidos en 1977.

Desde el Espacio para la Memoria y los Derechos Humanos exD2 repudiamos enérgicamente estos actos y esperamos que se tomen todas las medidas posibles tanto para dar con los culpables como para la protección y restitución de estos lugares.

El apropiador de Claudia Domínguez Castro vuelve a la cárcel

14-05-2020 | Por incumplir las pautas establecidas cuando se le otorgó el beneficio de la prisión domiciliaria, el tribunal ordenó la detención de Segundo Héctor Carabajal, condenado a diez años de prisión por delitos de lesa humanidad.

Por Colectivo Juicios Mendoza

El Tribunal Oral Federal 1 (TOF 1) de Mendoza revocó la prisión domiciliaria de Segundo Héctor Carabajal, concedida por su edad y estado sanitario en el marco de la pandemia de Covid-19. Violando las pautas establecidas, el exmilitar participó de una fiesta de disfraces que fue grabada y reproducida por WhatsApp. La evidencia fue presentada por Claudia Domínguez al denunciar la inconducta del exagente de Inteligencia y solicitar al tribunal que adopte las medidas pertinentes.

Según los abogados del MEDH Viviana Beigel y Pablo Salinas, querellantes por Abuelas de Plaza de Mayo, la revocatoria implica que Héctor Carabajal volverá a la cárcel federal de Cacheuta.

Segundo Héctor Carabajal fue condenado a el 7 de marzo de 2019 a 10 años de prisión, por la apropiación de Claudia Domínguez Castro quien recuperó su identidad en agosto de 2015.

La resolución completa del TOF 1:

La opinión del EPM frente a la situación carcelaria

El Espacio para la Memoria y los Derechos Humanos exD2 (EPM exD2) sentó posición ante a la situación de las personas privadas de libertad en contexto de pandemia. Algunas consideraciones sobre la justicia, la democracia y los derechos humanos.

Frente a la situación de la población carcelaria y la versión engañosa de que habrá liberación masiva de presos, desde el EPM exD2 -en coincidencia con organismos de derechos humanos que lo componen- ratificamos nuestro compromiso con la Justicia. Esta es la fortaleza que atraviesa nuestra historia.

En esa línea, sorprenden los dichos del gobernador Rodolfo Suarez colocándose por encima de la Justicia para determinar qué sucederá con los presos que solicitaron prisión domiciliaria. Asimismo, vemos con preocupación la doble vara utilizada por algunos actores sociales y medios de comunicación para abordar las prisiones domiciliarias otorgadas a los genocidas y las posibilitadas a otros detenidos por delitos menores.

Dada esta circunstancia, creemos necesario expresar nuestra posición y realizar algunas consideraciones imprescindibles.

El contexto de pandemia agrava la situación de ciertos colectivos en particular, por la mayor vulnerabilidad ante el posible contagio. En este grupo encontramos a las personas encarceladas, en tanto en caso de ingresar el virus a una cárcel, los efectos multiplicadores pueden ser desastrosos en términos humanitarios, considerando particularmente las condiciones de hacinamiento y carencia de condiciones de higiene dignas y seguras para la salud.

Es por ello que los organismos internacionales de derechos humanos, así como numerosos organismos nacionales, de la sociedad civil y de la propia justicia nacional y provincial, han tomado medidas y sugerido acciones de prevención y descompresión de las cárceles.

En este marco, algunos sectores sociales, políticos y mediáticos no han escatimado en tergiversar la información sentando una idea falaz: la liberación masiva de presos.

Los números provinciales y nacionales desmienten esto por completo y la Justicia ha dado sobradas explicaciones de que se está trabajando exclusivamente en la posibilidad de prisión domiciliaria de las personas en grupo de riesgo, o bien en las libertades condicionales y asistidas para quien legalmente se encuentran en condiciones de acceder a ellas.

La Justicia ha sentado también criterios para ello, desaconsejando medidas domiciliarias para quienes están por delitos graves y condenas largas, o por delitos contra el género o la integridad sexual, cuestión que compartimos.

Ahora bien, sorprenden dos cuestiones aquí. La primera es que la Justicia Federal, en particular la de Cuyo, ha dado una gran cantidad de domiciliarias a genocidas desde el primer momento de la pandemia. Es decir, el delito más grave de la escala penal, ha recibido una morigeración de la prisión sin mucho vericueto y sin ningún tipo de manifestación social y política en contra de estas.

¿Tenemos acaso una doble vara? ¿Nos parece más grave que una persona por hurto o robo vaya a su casa que que lo haga un genocida? De ser así, esto nos debe llamar a una profunda reflexión ética, social y política.

Por otra parte, ¿es este un tema que deba resolver un gobernador o el Poder Ejecutivo de cualquier nivel? La respuesta republicana es que no. Cualquier domiciliaria o libertad es una cuestión netamente jurídica y es el Poder Judicial el encargado de ello. Por lo que que un gobernador exprese que no liberarán presos de manera masiva ‒o a nadie‒ es una cuestión que funcionalmente le excede, pero además se asienta en una clara demagogia que lesiona la división de poderes y, por ende, la propia democracia.

Por último, la Justicia debe darle domiciliaria o libertad a quien corresponda, teniendo en cuenta la particular vulnerabilidad frente al contagio viviendo en hacinamiento y encierro. Y aquí, además de justicia, se requiere humanidad. Tanta humanidad como nuestra compañera Silvia Ontivero ha demostrado acordando con la domiciliaria de quien asesinó a su hijo Alejo. Tanta ética y humanidad como se requiere tenga la sociedad, la política, la justicia y los medios de comunicación.

Los organismos de derechos humanos nos identificamos en esta humanidad, en esta búsqueda incansable de justicia contra toda pretensión de venganza. No bajamos esta bandera frente a ningún contexto, pues es en esos valores en los que la memoria se asienta y fortalece. La situación carcelaria es parte de nuestra lucha, esta que sostenemos hace más de 40 años: una lucha incansable por la protección y defensa de los derechos humanos, por memoria, verdad y justicia.

Alejo Hunau y Silvia Ontivero

El EPM exD2 rechaza la represión en las cárceles de Mendoza

25-04-20 | El Espacio para la Memoria y los Derechos Humanos exD2 (EPM exD2), del cual forma parte el Comité Provincial de Prevención de la Tortura y otros tratos crueles inhumanos y degradantes (CPPT), rechaza la represión en el interior de penales provinciales.

Replicamos el comunicado que realizó el CPPT tras las últimas instancias de acuerdo logradas en la Unidad Penitenciaria III -penal destinado a mujeres y situado en la localidad de El Borbollón, Las Heras-.

Informe respecto a situación de mujeres privadas de libertad en U3 El Borbollón, Mendoza. 24 de Abril:

El Comité de Prevención de la Tortura estuvo presente el día de la fecha en la Cárcel de Mujeres del Borbollón, frente a los reclamos realizados por las mujeres allí alojadas, y la respuesta represiva de la institución.

Se constituyó espontáneamente una mesa de diálogo, en la que estuvieron presente: Sebastián Sarmiento Juez de Ejecución Penal, Romina Cucchi Subdirectora de Ejecución Penal de la Dirección de Derechos Humanos y Acceso a la Justicia, Luis Romero Procurador de las Personas Privadas de Libertad, Alfredo Guevara  Abogado colaborador del Comité de Prevención de la Tortura, y Patricia Farina del Comité Provincial de Prevención de la Tortura.

El reclamo de las mujeres tiene como fundamento el incumplimiento del Habeas Corpus resuelto en el marco de la pandemia, principalmente el impedimento y requisitos para el ingreso de celulares con cámara, a diferencia de otras unidades penales de varones.

De la represión resultaron cinco mujeres heridas por balas de goma disparadas a corta distancia, quienes también participaron de la mesa de dialogo, al igual que una referente de cada Sector, donde dieron testimonio de lo sucedido. El Juez Sarmiento puso en conocimiento a la Fiscalía de Violencia Institucional a fines de tomar declaraciones de las mujeres heridas.

Se resolvió que, desde el lunes se permitirá el  ingreso de celulares con cámaras como sucede en otros penales. Se atendió a las situaciones de pedidos de prisión domiciliaria. Las defensorías se comprometieron a trabajar cada una de las situaciones. Además se atendieron cuestiones relacionadas con reclamo de  ingreso de alimentos.

Se acordó que el lunes próximo se realizará nuevamente la mesa de diálogo para descomprimir la situación, y la misma se sostendrá el tiempo que sea necesario.

COMITÉ LOCAL PARA LA PREVENCIÓN DE LA TORTURA Y OTROS TRATOS O PENAS CRUELES, INHUMANOS O DEGRADANTES

Desde el Consejo Directivo del EPM exD2 exigimos al Ejecutivo provincial y a la Justicia que instrumente todas las medidas y supervisiones necesarias para garantizar la sanidad, integridad y contacto con sus familias de las mujeres detenidas en la Unidad Penitenciaria III, lo mismo para todas las unidades penales de la provincia.

El MEDH se posiciona sobre las prisiones domiciliarias en cuarentena

Compartimos a continuación el comunicado del Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos sobre la situación de las personas privadas de su libertad en el marco del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio dispuesto por el gobierno nacional debido a la pandemia de COVID-19.

Mendoza, 20 de abril de 2020

Comunicado ante la situación de las personas privadas de la libertad en medio de la pandemia por el “Coronavirus”

Desde el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos – Regional Mendoza, manifestamos públicamente nuestra posición frente a la amarga realidad que vive nuestro país y el mundo, con motivo de la pandemia que nos rodea y nos condiciona.

Uno de los aspectos que se distingue en este contexto, es el que involucra a las miles de personas que se encuentran privadas de libertad cuya vida puede estar en peligro. El objetivo de la privación legítima de libertad es la seguridad de cada una de las personas que la sufren y no su castigo. Art. 18 de la Constitución Nacional. Con lo que la retribución de pena que pueda corresponder por el delito cometido, no se conforma con la sola privación de libertad sino que además: “…La ejecución de la pena privativa de libertad, en todas sus modalidades, se encuentra dirigida al fortalecimiento de la dignidad humana y al estímulo de actitudes solidarias, a partir del desarrollo de sus potencialidades individuales y la internalización de valores, y tiene por finalidad lograr que el condenado adquiera la capacidad de respetar y comprender la ley, como así también la gravedad de sus actos y de la sanción impuesta, procurando su adecuada reinserción social, promoviendo la comprensión y el apoyo de la sociedad, que será parte de la rehabilitación mediante el control directo e indirecto. El objetivo es lograr la adecuada inserción social de los procesados y condenados a través de la asistencia, tratamiento y control y la protección de la sociedad frente al crimen. El régimen penitenciario a través del sistema penitenciario, deberá utilizar, de acuerdo con las circunstancias de cada caso, todos los medios de tratamiento interdisciplinario que resulten apropiados para la finalidad enunciada.”.Artículo 1ª ley de ejecución penal n° 24660.

La referencia que hacemos al artículo 18 de la Constitución Nacional es porque nos dice que: “… Las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquélla exija, hará responsable al juez que la autorice.”

Es habitual escuchar que muchas personas que habitan nuestro país, protestan ante lo que sería una cultura anómica en cuanto conducta que no respeta normas legales necesarias para una mejor convivencia. La primera reacción que tenemos como cohabitantes del país, es que así como los conductores de automóviles no le dan a los peatones la prioridad legal de paso en la vía pública, también las personas privadas de libertad deberían ser tratadas correctamente, con respeto, para que puedan aprender a respetar los derechos de los demás, como quiere la ley de ejecución penal antes mencionada.

Sin embargo, parece ser cierto que muchas personas a las que no les gusta que no se cumpla la ley, no reaccionan de la misma manera y con enojo, cuando se conoce con seguridad que el trato que se da a las personas en las cárceles, dista mucho de ser el que manda la letra de nuestra Constitución.

La pandemia que nos agobia nos pone ante situaciones humanas muy graves. En las cárceles del país hay miles de personas jóvenes y en su gran mayoría muy pobres que viven hacinados y en malas condiciones de higiene, entre otros males. Ello se debe a la violación del principio constitucional de igualdad ante la ley que cometen nuestros poderes judiciales.

También se encuentran privadas de libertad algunas personas procesadas o condenadas por delitos de lesa humanidad. En estos casos no se trata de una violación constitucional al principio de igualdad, sino que, excepcionalmente y debido a la lucha de muchos años de los organismos de derechos humanos, entre los que se cuenta al MEDH – Regional Mendoza, se ha logrado que los tribunales federales procesen y detengan legalmente, con las debidas garantías, a los ejecutores de gravísimos delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico militar.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ha establecido recientemente, como principio, que las libertades o prisiones domiciliarias que deben resolverse como consecuencia de la pandemia que padece nuestro mundo, deberán tener en cuenta la diversa naturaleza de las causas que motivan la privación de libertad, aunque siempre bajo el principio de humanidad y dignidad. En el mismo sentido que se ha expresado ese alto tribunal constitucional, entendemos que el principio es la libertad o prisión domiciliaria de las personas cuando la continuidad de su encierro implica un concreto peligro para su vida. Ello surge de cardinales normas constitucionales y de consecuentes disposiciones contenidas en los códigos procesales de orden provincial y federal. Artículo 106 de la Carta de la OEA, artículo 41.b de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y el artículo 18.b de su Estatuto.

La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Esta Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal y no representan a sus países de origen o residencia. Las opiniones consultivas y resoluciones de esta Comisión y de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que resuelve pleitos entre partes, tienen carácter imperativo y son obligatorias para los superiores tribunales de los países de nuestra América. Allí radica la importancia de lo que ha establecido la Comisión.

En la línea de esa disposición, el presidente del superior tribunal penal bonaerense, Víctor Violini, decidió hacer lugar a un habeas corpus presentado la semana pasada por once defensores generales, quienes sostenían que las condiciones de hacinamiento e inhabitabilidad en cárceles y comisarías provinciales se ven agravadas ante la emergencia sanitaria del coronavirus. La Comisión Provincial por la Memoria (CPM), mecanismo contra la tortura bonaerense, adhirió al planteo como amicus curiae. El juez ordenó que cada juzgado o tribunal bonaerense debe dictar la prisión domiciliaria de los detenidos a su cargo, que estén presos por delitos leves y que se encuentren en situación de riesgo por edad, por patologías preexistentes o sean mujeres embarazadas o con hijos. Para delitos graves – asesinatos, secuestros, violencia de género o abusos sexuales – será cada juez el que deberá analizar los pormenores del caso. El Ministerio Público pidió que se tuviera especial cuidado si se conceden domiciliarias a condenados o procesados por agresiones sexuales o violencia doméstica para evitar su acercamiento a las víctimas o que vuelva al lugar donde cometió los delitos. El contexto de todos estos casos resueltos y a resolver es que existe una crisis penitenciaria sin precedentes en la provincia de Buenos Aires, reconocida ya el año pasado por la propia Casación bonaerense.

En el mismo sentido en favor de la libertad en los casos mencionados se pronunció el Comité Nacional para la Prevención de la Tortura (CNPT) y cabe destacar que el asunto llegará pronto a la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

En Mendoza, la Asociación para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos Xumek, también presentó un habeas corpus por la integridad de las personas privadas de la libertad en nuestra provincia -se estima que la “población de riesgo” es de alrededor de 400 personas-, al que han dado lugar aisladamente desde algunos juzgados.

Delitos de Lesa Humanidad

Mientras tanto, es probable que la sala de feria de la Cámara de Casación Federal, esta semana o la siguiente, tenga para resolver planteos de Miguel Osvaldo Etchecolatz, que insiste con obtener su prisión domiciliaria. Atentos particularmente a la situación de personas como ésta, considerada como una de las principales responsables de la represión genocida en el país y condenada por ese motivo varias veces, este Organismo hace hincapié en la delicada situación que deberán enfrentar los tribunales federales en el caso de pedidos de prisión domiciliaria de quienes han sido condenados por genocidio y delitos de lesa humanidad. Sobre ello se ha pronunciado expresamente la CIDH en su Resolución 1/20 del 10 de abril.

En el caso de personas condenadas por graves violaciones a los derechos humanos y delitos de lesa humanidad, atendiendo el bien jurídico afectado, la gravedad de los hechos y la obligación de los Estados de sancionar a los responsables de tales violaciones, tales evaluaciones requieren de un análisis y requisitos más exigentes, con apego al principio de proporcionalidad y a los estándares interamericanos aplicables.

En las cárceles federales argentinas, la gran mayoría de las personas mayores privadas de su libertad son condenados o acusados por delitos de lesa humanidad. Según el SPF, actualmente hay 131 represores presos y dos internados en hospitales extramuros. Para ellos, la CIDH aclaró, como ha sido transcripto en el párrafo anterior, que la evaluación de los jueces debe ser más exigente: “Con apego al principio de proporcionalidad y a los estándares interamericanos aplicables”. La Procuraduría de Crímenes Contra la Humanidad – a cargo de la fiscal Ángeles Ramos – tiene contabilizados 136 pedidos de domiciliarias. El número supera el de los represores en prisión porque son muchos de ellos los que tienen distintas causas en distintas jurisdicciones.

Hasta ahora, la tendencia es hacia el rechazo, pero al menos 25 represores lograron salir de la cárcel desde que se declaró la emergencia sanitaria.

Cabe destacar en este apartado, que nuestra representación legal ha logrado también justificar puntualmente el rechazo a este beneficio en la reclusión de la pena, aunque se han concedido varias prisiones domiciliarias a personas condenadas o procesadas por estos graves crímenes contra la humanidad.

Entendemos que tal como lo ha establecido la CIDH, la situación de los condenados y procesados por genocidio deberá atenderse con la proporcional gravedad de sus delitos en relación al resto de personas procesadas y condenadas por delitos de orden común. Esto significa que deberá extremarse la consideración sobre sus condiciones de encierro y la posibilidad de permanecer en esa situación sin riesgo concreto para sus vidas debido a la pandemia y a sus particulares situaciones de salud.

Sobre estas condiciones de encierro habrá que tener en cuenta, con seguridad, que los lugares en que están alojados, tengan o no las malas condiciones que padece el resto de condenados por delitos comunes y por lo tanto puede que no corran aquel peligro.

Curso con puntaje docente en el EPM

08-04-2020 | Con el objetivo de sostener acciones educativas en relación a la pedagogía de la memoria, el EPM ex-D2 propuso un curso con puntaje docente. Será dictado por especialistas de distintas áreas. La resolución fue aprobada en marzo por la Dirección General de Escuelas.

La Coordinadora General de Educación Superior, Emma Cunietti, aprobó por resolución el curso “Enseñar el pasado reciente: enfoques conceptuales y metodológicos desde la pedagogía de la memoria“. El proyecto fue presentado por el Espacio para la Memoria y los Derechos Humanos ex-D2 (EPM ex-D2) y las clases estarán a cargo de profesionales de distintas disciplinas.

Además, el EPM ex-D2 fue reconocido como ente calificado para desarrollar contenidos pedagógicos, tarea sobre la que viene trabajando arduamente la Comisión de Pedagogía de la Memoria. La resolución considera que la propuesta es “una iniciativa destinada a asegurar el mejoramiento de la capacitación inicial y continua de los docentes como factor clave de la educación, proyectando la redefinición de componentes del formato escolar tradicional, promoviendo nuevos medios de habitar las escuelas y proporcionando herramientas para la innovación y reflexión sobre la práctica compartida con los estudiantes“.

Contexto histórico y Proceso de Reorganización Nacional, genocidio y recursos didácticos para la enseñanza de la historia reciente son los cuatro ejes centrales del curso. El dictado de la primera cohorte quedará sujeto a las posibilidades y cronograma que se acuerde en los próximos meses, en consideración de la situación que plantea la pandemia de COVID-19 y la reestructuración de los procesos formativos.

Para el abordaje interdisciplinar del curso se articularán contenidos de historia, sociología, derecho, pedagogía y las ciencias sociales en general. El objetivo de incorporar conocimientos sobre el pasado reciente es que estos saberes potencien en el personal docente “la construcción de una identidad nacional plural y solidaria, una ciudadanía crítica y la promoción de los derechos humanos y los valores democráticos“.

La información acerca de la fecha de inicio, duración y modalidad de cursado se dará a conocer más adelante.

VIDEO: Documento a 44 años del golpe cívico militar

ORGANISMOS DE DERECHOS DERECHOS HUMANOS DE MENDOZA

30.000 decimos ¡Presente!

A 44 años del golpe militar del 24 de marzo que arrasó nuestras vidas, produjo la debacle económica del país y el terror social, reiteramos nuestro compromiso con la lucha de los pueblos.

En los pasados cuatro años atravesamos el negacionismo, el intento del 2×1 y la desaceleración de las políticas de Estado sobre el pasado reciente. Nos contraría la lentitud de la Justicia Federal y la liviandad con que se vienen otorgando prisiones domiciliarias a los militares y policías condenados por delitos de lesa humanidad, mientras se las niega a los presos políticos, víctimas de causas arbitrarias, y aún en los casos en que peligra su vida.

Asimismo, es imprescindible que Mendoza adhiera a la Ley de Sitios de Memoria: para que se visibilicen los ex centros clandestinos de detención, el estado provincial cumpla con el apoyo del EPM ex D2 y promueva la demorada ley que lo formalice. También para evitar la banalización de la comisaría 7ma e incluirla en los términos de la ley de sitios.

Nuestra lucha fue inscripta en la historia del pueblo argentino por su libertad, hoy vulnerada por el Código Contravencional utilizado en especial contra jóvenes estigmatizados por la pobreza y el color de su piel o en la represión a gestas populares en defensa del agua y los bienes comunes. A ello se suman multas e imputaciones dirigidas a la ciudadanía por manifestarse en las calles.

En este día de la Memoria homenajeamos a Agustina Vera, Madre de Plaza de Mayo; Ramón Ábalo y César Boggia, por su compromiso militante; y a Sebastián Moro, muerto en la ciudad de La Paz, durante los días del golpe de estado en Bolivia.

Ratificamos todas y cada una de las históricas demandas sostenidas por los organismos de derechos Humanos y hoy con urgencia reclamamos:

– Celeridad de los juicios por delitos por delitos de lesa humanidad y cárcel efectiva para los genocidas
– Adhesión de la Provincia a la Ley de Sitios de la Memoria
– Independencia del Poder Judicial y libertad a los presos y perseguidos políticos

MEMORIA
VERDAD
JUSTICIA

La Memoria no se rinde

En un nuevo aniversario del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, ratificamos nuestro firme compromiso con la Memoria. Recogemos el legado de hombres y mujeres que atravesaron el entonces D2 resistiendo el horror. En este ex centro clandestino de detención, torturas y exterminio se intentó aplastar el proyecto liberador de cientos de detenidos y detenidas que se opusieron a un plan económico y social concebido a espaldas del pueblo argentino. Este lugar fue testigo de la planificación y puesta en marcha de la represión ilegal que desgarró sus vidas, fue punto central del terrorismo de Estado en Mendoza.

Por su valor simbólico e histórico, desde este Espacio -refuncionalizado con la fuerza de nuestras banderas y las miradas de lxs 30 000- asumimos el deber de impedir el olvido y echar luz a la trama nacida antes y durante la dictadura cívico militar.

Tres columnas que dicen Memoria, Verdad y Justicia señalan este Sitio, y nos recuerdan nuestra responsabilidad asumida ante la sociedad mendocina en la reconstrucción y difusión del pasado reciente, la consolidación de la cultura democrática proyectada hacia las próximas generaciones y la observancia del respeto de los derechos humanos en el presente.

30 000 compañeros y compañeras detenidas desaparecidas…
¡PRESENTES! ¡AHORA Y SIEMPRE!

Consejo Directivo del EPM exD2 | Marzo de 2020

Comunicado de Organismos de DD. HH. Mendoza

A pesar de las medidas de aislamiento tomadas por los gobiernos nacional y provincial, los Organismos Defensores de los Derechos Humanos en Mendoza se preparan para la conmemoración del Día de la Memoria por la Verdad y la justicia. Aquí el comunicado.

A 44 años del Golpe Cívico Militar Eclesiástico de 1976 en Argentina, decidimos suspender la marcha que realizamos todos los años. Nos sumamos responsablemente a las medidas tomadas por el Gobierno Nacional y el provincial ante la pandemia de coronavirus que aqueja al mundo.

Pero no nos quedamos quietxs ni nos quedamos calladxs.
No lo hicimos nunca. No lo haremos ahora.

📌Durante el 24/03 estaremos compartiendo contenidos y mensajes a través de las redes sociales.

📌Además, instamos a que todos, todas y todes seamos parte de una profunda jornada por la Memoria, la Verdad y la Justicia
📢 Proponemos: 📢

👉🏾usá en tus posteos, estados y fotos de perfil las consignas:
Memoria, verdad y justicia | Somos 30mil | Fue genocidio | 30.000 presentes

👉🏾 usemos el hashtag #24MenMendoza junto a algunos de estos otros:

#MemoriaVerdadJusticia
#Somos30Mil
#FueGenocidio
#30MilPresentes

👉🏾colgá un pañuelo blanco en la puerta de tu casa junto con la bandera argentina, sacale fotos o selfies y compartilas. Si no tenés pañuelo, aquí te compartimos unos diseños para imprimir y hacerlos en papel.

30.000 COMPAÑEROS Y COMPAÑERAS DETENIDAS DESAPARECIDAS ¡PRESENTES! ¡AHORA Y SIEMPRE!

Marzo 2020. Organismos de Derechos Humanos de Mendoza

Hoy, Memoria por Sebastián Moro

En el marco de la campaña de reclamo de justicia por la muerte de Sebastián Moro, ocurrida en el contexto del golpe de estado en Bolivia, invitamos a participar de este necesario homenaje su trayectoria periodística y calidez humana. Será el 19 de marzo a las 19:00 en el Espacio para la Memoria y los Derechos Humanos exD2.  

Sebastián Moro fue un querido compañero y periodista comprometido con su profesión y con las luchas por Verdad, Memoria y Justicia. Entre sus muchos trabajos destacamos los realizados con el equipo del Blog del Juicio en la cobertura de las audiencias por delitos de lesa humanidad y el seguimiento de los casos de violencia institucional de nuestra provincia.

Se expondrán trabajos de lxs artistas Ramiro Maroa, Mariano Mari, Andrés Guerci, Paula Casciani, Gustavo Guevara, Teke DellaPenna, Carolina Simón, Ayelén Bonelli, Mariposa Posa, Alicia Motta, Mauco Sosa, Mariana Baizán, Darío Manfredi, Sabina Murano Moro,  Brain Drain, Cristina Pérez y Bruno Cucusa.

Además, darán testimonio sobre el aporte periodístico de Sebastián Moro: Miriam Medina, Pablo Salinas, Valeria Fernández Hasan,  Julio Coronado y Carmen Dolz.

El cierre musical estará a cargo de Cristina Pérez.